lunes, 7 de julio de 2008

Amantes...




¿Cómo pretendo olvidarte?

Eso seria lo mismo que morir…

Lo mismo que no haber nacido…

Lo mismo que no haberte conocido, pero esperarte pues sé que existes con el solo propósito de amarme tanto como yo a ti…

Y es que no sé si la amas, y si es así, ¡ay por dios!
Que envidia tan grande la que corroe por mis venas, así como las ganas de volver sentirte tu piel contra la mía, sudando gota a gota la pasión desenfrenada que sentimos cada vez más…

Y es que mi cuerpo, gime cada vez más fuerte por el tuyo…
Lo pide, lo desea, lo anhela, pero sobre todo lo siente como una necesidad que va a permanecer vigente desde que lo conozco y por lo mismo siento amor con desdén…

Y es que tu boca…
Se adueñaba de la mía y recorría mi cuerpo a su antojo, pero sobre todo, pudo besar ligeramente mi vientre y descubrir el punto cumbre de mis deseos y mayores pasiones…

Y después de ese beso, hundirme en ti y quedarme como tu necesidad de hombre y ser…

Y para variar, tu cuerpo como bocado de mis ganas y tus besos que tan llenos de pasión se conviertan en los que calman mis ansias…

Reflejada en el brillo de tu mirada esperar a la noche para que se convierta en la cómplice de nuestro romance repentino, y que estupefacta de ver lo que somos en uno solo, tú y yo, se alegre y vaya hacia Dios a contarle lo que sus hijos hacen sin consentimiento alguno…

Y que a pesar de la oscuridad de la noche, estén las estrellas como miles de ojos que admiren nuestros cuerpos desnudos en la suave danza de cumplir sus deseos…

1 comentario:

uember dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.